jueves, 23 de junio de 2011

¿Cómo se puede estar sobre un escenario sabiendo que afuera, en la calle la gente está gritando?

 "Olga, va a haber una revolución en nuestra patria y va a ser tan linda. La gente va a salir a cantar en las calles y después van a morir (...) ¿Así van a poder actuar mejor? La revolución se hizo para gente como ustedes, para poderlos quemar. ¿Cuánto rato se puede hablar de amor? (...) Sí, Olga. Se murió tu marido y quieres revivir su muerte porque no puedes actuar. ¿A quién le importa? Afuera hay un domingo sangriento, la gente se está muriendo de hambre en la calle y tú quieres hacer una obra de teatro. La historia pasa como un fantasma, va a haber una revolución. ¿Y quién es tan imbécil para encerrarse en una sala de teatro y sufrir por amor y por la muerte? Me da vergüenza ser actriz. Es tan egoísta, es una trampa burguesa, un basurero, un establo de yeguas. Actores de mierda. Indolentes, ignorantes, pretenciosos, vacíos, cáscaras de maní, tomates podridos. (...) Esto ya no es el siglo XIX, ahora el capitalismo tiene máquinas. Me dan asco. Podría partir por quemar este teatro, me gustaría verlo arder y con él la arrogancia y la vanidad. Detesto el amor del teatro, sus gestos falsos, su clase, su sorna, Me ahoga. ¿Quieren hacer algo que sea de verdad? Salgan a la calle y vean la fuerza simple de la violencia política, el fin del régimen. Es tan lindo matar a un General y reventar a un ministro con una bomba, sale olor a justicia. Vamos a tomar, vamos a ganar guerras y vamos a cantar en los funerales. Oh, mi querido, mi dulce, mi bello teatro. El amor me da risa. El teatro es una mierda. Los actores son unac mierda. Me imagino una revolución. El mundo se va a acabar y nunca vamos a ser libres. ¿Para qué perder el tiempo haciendo esto? ¿Cómo se puede estar sobre un escenario sabiendo que afuera, en la calle, en el mundo, la gente está muriendo? Arte burgués, teatro burgués. Odio al público que viene a sentir, me odio por ser actriz. (...) ¿Quieres sufrir sentada, cómoda, como se sufre en el teatro? Siéntate en Persia, en Turquía, en Manchuria, en Polonia y deja que la guerra te aplaste. ¿Quieres llorar? Anda a trabajar a una fábrica como lo hacen los niños y sécate los pulmones con hollín de carbón. Pero no me vengas a decir que en el escenario se sufre. Porque no se sufre. Se sufre en la vida. Detesto al público, estos simplones que vienen a entretenerse mientras el mundo se acaba. Vienen a buscar cultura, a suspirar. Les debería dar vergüenza.  (...) Actores de mierda, vanidosos, se creen artistas, pero son fantasmas."
 Neva, Guillermo Calderón 


Es necesario plantearnos como actores la idea de "la verdad" que en nuestras clases de actuación y en autores como Stanislavsky, Uta Hagen o Eugenio Barba es un tema recurrente. La búsqueda de la verdad. 
¿Como puedo hacer real las emociones que el personaje me exige? ¿Como puedo sentir realmente odio, ira, amor, tristeza, nostalgia?
Como es sabido existen técnicas para esto. Podemos emplear una memoria emocional, sensorial o física rememorando eventos o situaciones pasadas que generaron en nosotros cierta emoción para luego evocarlas en escena y servirnos de estas al momento de actuar. 
Por ejemplo: Si en una obra mi personaje sufre por la muerte de un padre y mi realidad es que nunca he experimentado ese sufrimiento, invoco algún momento doloroso que haya vivido y lo sustituyo. De este modo pretendo encontrar la verdad en lo que siento, en lo que actuo basandome en lo antes vivido. Pero ¿qué sentido tiene esto mientras afuera, en la ciudad, en las calles está ocurriendo otra verdad? ¿Cómo esto como artista no me va a lograr conmover hasta el punto de involucrarme directamente con la causa? 
Lo cierto es que lo que está sucediendo a nivel país forma parte de nuestra experiencia, esto quedará en nuestro inconciente y será recordado en le futuro.  Todo esto es una verdad a la que no podemos darle la espalda, ¿Queremos sentir? Hay todo una muchedumbre sintiendo, gritando y manifestando que algo no esta bien. No podemos quedarnos quietos mientras un pueblo se expresa. 
Creo que el teatro se da en las calles más que en una sala de clases. Creo que aprendemos más de la vida afuera que encerrados. Creo que por esta vez debemos dejar de concetrarnos en una educación formal positivista y entender que algo grande está pasando y que debemos prestarle atención. Debemo protestar a travéz de arte.
Como decía Brecht "El arte no es un espejo para reflejar la realidad, sino un martillo para darle forma."

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