viernes, 22 de abril de 2011

" La deuda"

" Mi padre se quedó ciego cuando yo estaba en el vientre de mi madre. Al enviudar me convirtió en su lazarillo. Vivimos de la mendicidad. En estas épocas de crisis recibimos pocas limosnas. Andamos por un barrio tenebroso, hace frío, mi padre gime de hambre. < No te preocupes, le digo, comeremos.> Sacudo el polvo de nuestros abrigos y entramos en un restaurante chino. Nos sirven varios platos que devoramos con delicia. Le digo al servidor:< No tenemos con qué pagar.> <¿Está seguro?>, me responde sonriente y lanza un silbido que imita al ruiseñor. Llegan dos enormes chinos que me atan a la silla. Mi padre me murmura al oído:<Perdóname.> El servidor sale y luego vuelve trayendo un frasco y una cucharilla de marfil. Mostrándome los dos ojos que están en el interior de la redome me dice con dulzura: <No te preocupes, muchacho, me pagarás en la misma forma que lo hizo tu padre.> Y me hunde la cucharilla en las cuencas. <Un día, para saldar definitivamente la deuda, tendrás que traerme a tu hijo.>

No hay comentarios:

Publicar un comentario